¿Por qué respetas las creencias ajenas?

Es una pregunta dirigida a los que profesan alguna religión.

Digo, si crees que Dios sólo salvará del castigo eterno a los que crean en Él, ¿No te parece que estás cometiendo un acto de infinita crueldad permitiendo que haya gente con otras creencias? ¿Por qué dejas pasivamente que se condenen?

¿Por qué los creyentes permiten que los ateos nos condenemos al Fuego Eterno? ¿Eh?

Qué crueles son...

Pues yo no creo en ningún Dios. No creo en el Cielo ni en el Infierno. De hecho, no creo que vaya a vivir ni un instante después de morirme.

Además, soy bastante blasfemo, jejeje, lo confieso.

¿Por qué permiten que me condene? Deberían hacer algo al respecto. Somos muchos los que pensamos así.

¡Vamos, hagan algo, caramba! O Dios los va a castigar, por su impiedad.

Peor la van a pasar los creyentes cuando descubran que no hay nada después de muerte, tantas ilusiones que se hicieron para terminar así. 

Pero hay que tener fe y eso no se como se logra, soy racional y para creer, Dios tendrá que presentarse en persona para que crea.

Supongo que hay que ser feliz para sentirlo, yo ahora no siento ninguna sensación divina.

No es cierto que los creyentes sean más felices que los ateos. Lo niego categóricamente.

Y lo puedo demostrar argumentalmente.

Yo también niego, que creyentes sean más felices que ateos... Símplemente, ateos no se niegan a ser negativos de vez en cuando, al igual que puede existir un creyente negativo.
Cada uno es feliz con lo que puede.

Rafa: Es posible que existan creyentes  “de a pie” que sean ampliamente respetuosos,  pero eso no ocurre con su organizaciones. Todas ellas pretenden seguir captando adeptos para sus filas y/o seguir aumentando sus prerrogativas, y no se fijan demasiado en los medios para lograrlo. De todas maneras, entiendo el sentido de tu pregunta; aunque me pareció importante hacer la distinción.
Romina: ¿Qué nos dejas para los ateos? ¿Hasta dónde llega tu “radicalismo”? ¿Simplemente quedamos como unos parias?
Misteryus:  No te preocupes por eso, no creo que se enteren.
Romina 2: La verdad, prefiero ver el vaso medio vacío a vivir de ilusiones. Además, qué te hace suponer que somos menos felicites que los creyentes?
Romina 3: Apelando a tu excelente formación científica, si los dioses están en el corazón de cada quien, comprenderás que se hace sumamente difícil extraer una evidencia objetiva de ahí. En consecuencia, los que no sentimos nada nunca les vamos a creer.

“Como científica soy más atea que el mejor de los ateos jajajaja”



Bueno, yo estoy lejos de ser siquiatra, pero….a eso no se le llama “doble personalidad”?



"Lo que admiro de los ateos es su tenacidad para sostener siempre que no creen en algo…”


Uhhh… eso me suena conocido. Y siempre recurro a lo mismo, para evitar ambigüedades: el DRAE:
creer:(Del lat. credĕre).
1. tr. Tener por cierto algo que el entendimiento no alcanza o que no está comprobado o demostrado.
2. tr. Dar firme asenso a las verdades reveladas por Dios.
3. tr. Pensar, juzgar, sospechar algo o estar persuadido de ello.
4. tr. Tener algo por verosímil o probable. U. t. c. prnl.
Te puedo asegurar que, en lo personal, no comparto las opciones 1 ni 2, solamente acepto las opciones 3 y 4.
Prefiero decir que “acepto como verdaderas”  aquellas afirmaciones que muestran las suficientes evidencias.
 Como ateo, soy más científico que el mejor de los científicos.

Voy a ir por parte, contestando tu pregunta.

En primer lugar, no creo que la salvación sea sólo para los creyentes, y menos aún, sólo para los católicos-apostólicos-romanos, Iglesia a la cual pertenezco.  Creer eso, sería convertir a Dios en un Padre cruel y despiadado que permite el nacimiento de hijos ya condenados, como es el caso de los niños que nacen en culturas donde jamás lo conocieron o conocerán: familias musulmanas fundamentalistas, budistas del Tibet, tribus africanas, etc , etc.

Tampoco creo que los ateos estén condenados al "fuego eterno" . Cada persona rinde cuentas por sus actos, tanto buenos como malos. Entre un ateo que adopta un niño abandonado, le da amor, una familia,  educación, le entrega valores y felicidad, y un creyente que abandona a su hijo desde antes de nacer, lo niega y jamás se arrepiente de su irresponsable y cobarde acto, estoy segura que la salvación se la ha ganado el ateo, porque supo dar amor. En ese niño, amó al  prójimo, como Cristo nos amó.

En tercer lugar, no creo en el "fuego eterno". No hay un lugar físico donde los espíritus sean enviados. El infierno es un estado de permanente sufrimiento por la ausencia de amor. Y ese estado, lo vive el espíritu que no logró divinizarse para regresar al origen,  que es Dios.

En cuarto lugar, y no por eso menos importante, jamás le impondría mis creencias religiosas  a nadie, ni aceptaría las de otros a la fuerza. Todos tenemos el libre albedrío, y decidimos en quién creer o no creer. Somos seres únicos e irrepetibles y no somos diseñados en serie, con el mismo programa de fé, inteligencia, estatura, color de piel o cabello, etc. Cada uno elige lo que quiere ser, hacer y a quien amar.  Lo mismo, con su fé. Si la tiene o no, es decisión personal y yo al menos, se la respeto.

En quinto lugar, debo decirte que ninguna religión es la verdadera. Todas tienen verdades y mentiras, y el simple hecho de pertenecer a una no garantiza la salvación. Son muchos los factores involucrados en lo que conocemos como "salvación". Es aprender a dar sin pedir, amar incondicionalmente aún al que te daña, etc. Como dije antes, es divinizarse y eso no se logra imponiéndole creencias religiosas a nadie. Jesús no condenó a nadie por no aceptarlo. Èl sólo enseño un camino que lleva a la salvación, pero, insisto, no es el único.

Por último, creo que el mundo es lo suficientemente grande para albergarnos a todos, y es redondo para que podamos encontrarnos. Sólo la intolerancia hace que las personas impongan sus creencias. Me gusta encontrar diferentes opiniones, puntos de vista y creencias. Y respetarlas, no es sinónimo de crueldad, sino de amor y respeto. Sé que si quieres ser salvo, encontrarás el camino sin necesidad de que alguien te lo imponga.

No todas las creencias son respetables aunque se respete a la persona.